Soy Iván Rivera, PMP
Soy fan de Starwars, disfruto la Ciencia Ficción y escribo sobre gestión de proyectos (o lo que se me
Desde el repositorio de temas importantes propongo ahora este post de Brad Egeland que aunque fechado en 2013, es un tema que no pasa de moda.
Como dice Brad, ningún administrador de proyecto quiere estar en un proyecto fallido o hacerse cargo de un proyecto fallido, a menos que tenga complejo de Superman y guste de tratar de salvar el día. Pero es una realidad de la profesión de Administración de proyectos: más proyectos fracasarán que triunfarán. Varias encuestas han encontrado que entre el 50 y el 75% de todos los proyectos fracasan en algún grado, ya sea por temas de presupuesto, de cronograma, de satisfacción del cliente o simplemente por la incapacidad de entregar la solución planificada.
Lo que Brad sugiere es planificar cómo tratar con los problemas y riesgos en los proyectos y tener algunas estrategias clave para revertir aquellos proyectos que parecen dirigirse rápidamente hacia el fracaso. Si bien las formas específicas de arreglar un proyecto fallido dependerán de los problemas particulares que este enfrentando, Brad sugiere tres estrategias generales e innovadoras con un buen grado de éxito para ayudar al Administrador del proyecto a llegar al corazón de los problemas, mejorar la situación con un cliente insatisfecho u obtener la cooperación necesaria de los involucrados en el proyecto para volver a encaminar el proyecto con diferentes grados de costo y esfuerzo.
Cuando surgen problemas, especialmente problemas que detengan el proyecto, siempre es una buena idea volver atrás. Por supuesto, en sentido figurado. Resulta muy útil volver al comienzo del proyecto y revisar los informes de estado, las iteraciones del cronograma, las decisiones que se tomaron y cualquier cambio en el alcance e intentar determinar qué llevó a la posición problemática donde ahora está el proyecto. Identificar la causa, puede ayudar a resolver los temas y, con suerte, identificar una solución… o al menos un conjunto razonable de acciones para volver al camino correcto y salvar el proyecto.
Pedir consejo.
Algunos Administradores de proyecto (y otros roles de liderazgo) suelen pensar que en tiempo de crisis se puede traer ayuda externa. Consultoria de fuera de la organización. Brad reconoce que esta solución no le ha sido rentable, porque puede ser muy costoso y, a veces, puede no ser beneficioso.
Así que Brad solo lo recomienda como un último esfuerzo. ¿Por qué?
Por el contrario, Brad propone buscar recursos que ya estén en la organización: expertos en la materia que no forman parte del proyecto pero que pueden estar disponibles para asesorar, aportar experiencia puntual o tutoría al personal del proyecto con poco o nada costo para el proyecto. Y ciertamente mucho más barato que el dienro que va a costar traer a un consultor externo, ponerlo al día y hacer que entreviste a cada interesado del proyecto para obtener una visión de 360 grados del proyecto antes de que realmente pueda comenzar cualquier actividad productiva. trabajo. Y eso es facturable, por supuesto.
Replanificar.
Este proceso es doloroso, arruina completamente el impulso y puede ser muy costoso. Pero también puede ser lo único que queda si la decisión es tratar de salvar el proyecto. Implica volver a la fase de planificación y revisar los requisitos. No en un nivel alto … eso sería parte del proceso de «volver sobre tus pasos» muy probablemente. No, este proceso implica una mirada muy profunda a los requisitos y probablemente una nueva planificación, revisión y probablemente reestructuración (incluido el personal) del proyecto para reiniciar cualquier avance. Es casi como comenzar un nuevo proyecto o comenzar de nuevo en cierto sentido. Pero puede ser la única esperanza.
Si requieres ayuda con tus proyectos, puedes contactarme a través de mis redes sociales:
Fuente: Iván Rivera PMP (¿Cómo puede recuperarse un proyecto que está fallando?).
